Forramos el plato del microondas con papel de horno.
Lavamos la patata y con la ayuda de una mandolina, la cortamos en rodajas.
Lavamos y secamos las rodajas con papel de cocina y las colocamos en el plato del microondas en una sola capa. Echa un chorrito de aceite de oliva virgen extra (poco) y extiéndelo con la ayuda de una brocha de silicona. Echa un poco de sal y si quieres añadir alguna otra especie (pimienta, pimentón dulce...).
Introduce en el microondas a máxima potencia (800W) durante 4 minutos. Saca el plato con cuidado (vas a necesitar una manopla o trapo de cocina). Deja la puerta del micro abierta para que se vaya el vapor y dale la vuelta a las rodajas de patata.
Repetimos el paso 4 dos veces. En total 12 minutos. Verás que algunas patatas ya están listas y empiezan a dorarse. Puedes poner las demás patatas otros dos minutos. Vigila el microondas ya que a partir de ahora se te pueden pasar fácilmente.