Precalienta el horno a 180º con calor arriba y abajo. Mide los 3 ingredientes.
En un cuenco mediano, mezcla el sirope de arce con la crema de avellanas y a continuación añade la harina de almendras. Mezcla bien y déjalo reposar un par de minutos. Verás que la harina ha absorbido los líquidos y ya lo deberías poder manejar con las manos.
Yo he hecho 12 galletas pero si las quieres hacer más pequeñas, está bien ya que son muy saciantes. Eso sí, reduce un poco el tiempo de horneado que no se te pasen.