bechamel sin gluten de santa rita

Hace unos días recibí un paquete de la marca Santa Rita. En él me mandaron una muestra de su pan rallado sin gluten y de su bechamel sin gluten.

Desde el primer momento la bechamel sin gluten de Santa Rita me llamó la atención ya que es instantánea y se hace en frío.

A mis hijos, imagino que como a muchos niños (y mayores) les encantan las croquetas. Pero a mí es una comida que me da siempre mucha pereza hacer.

Me gustaría aclarar que este post no es patrocinado (no recibo compensación económica por escribirlo). Es mi opinión real sobre un producto que me han regalado, pero que compraré ya que nos gustó por distintos motivos que enseguida pasaré a contarte.

Aclarado este punto, decidí probar los productos siguiendo las instrucciones que vienen en el paquete. Lo primero es pesar 100 gramos de la mezcla de bechamel, añadir pollo, jamón ibérico, huevo duro, etc. En mi caso, añadí un poco de pollo. Seguidamente, se añade 335 mililitros de leche fría. Yo utilicé leche sin lactosa desnatada (quizás sería mejor usar algo más de grasa, pero siempre consumimos leche desnatada).

Se mezcla en frío y rápidamente empieza a tomar forma y cuerpo. Seguí las instrucciones que indican formar las croquetas, enharinar, pasar por huevo y después rebozar en pan rallado. Utilicé harina de arroz para enharinar, dos huevos y el pan rallado sin gluten de su marca, Santa Rita.

croquetas con la bechamel sin gluten de Santa Rita

Para formar las croquetas, me unté las manos en aceite de oliva virgen extra, así la masa no se pega. Recuerda que nuestras masas sin gluten son especialmente pegajosas. Me salieron 23 croquetas pequeñas que freí en abundante aceite de oliva suave. El aceite debe estar caliente pero no en exceso para que no se quemen. Es recomendable freír las croquetas en tandas de 2-3 para que no se abran.

Luego se colocan sobre un papel de cocina para que absorba el exceso de aceite. He observado que el pan rallado de Santa Rita no se oscurece como otras marcas, pero sí notas que se queda bien crujiente.

Además, con el mix de bechamel sin gluten de Santa Rita puedes hacer bechamel más líquida (también en frío) para hacer espinacas gratinadas o para lasaña o canelones. Es súper fácil de usar, ¡así que a mí me ha convencido! Ya la he visto a la venta en Alcampo, pero estaré pendiente para ver dónde más se puede comprar.

Si eres como yo, que te da mucha pereza freír pero quieres disfrutar de unos ricos fingers de pollo caseros: sin gluten y sin horno.