Que me gustan las ensaladas es un hecho que creo que ya te he contado en más de una ocasión, ¿verdad? Pero creo que esta ensalada de tomate aguacate y mozzarella te va a encantar por lo fácil que es de hacer y porque además, está muy rica.
En esta ocasión son muy pocos ingredientes y a diferencia de otras ensaladas, esta ensalada es más bien un acompañamiento o primer plato. Esta ensalada de tomate, aguacate y mozarella es perfecta para acompañar todo tipo de aves, carnes o pescados.
Como verás en la foto, lo he servido de una forma un poco original: agrupando cada ingrediente. Queda muy bonito y se puede servir así en una ensaladera grande o incluso en cuencos individuales.
Puedes aliñarlo como más te guste, pero en casa nos gusta con el tradicional aliño de aceite de oliva virgen extra (AOVE) y un chorrito de vinagre de Módena o mostaza Dijon. El aliño suelo hacerlo en un bote de cristal y lo añado a la ensalada justo antes de comer. Si vas a preparar la ensalada con cierta antelación, sí te recomiendo echar un poco de zumo de limón en el aguacate para que no se ponga feo.
Esta receta se puede alargar (para que cunda más) añadiendo una bolsa de lechugas de brotes verdes. En tal caso, yo lo pongo en el fondo de la ensaladera, a modo de cama. Sino, puedes hacerlo con los demás ingredientes y queda también muy rico.
Si eres tan fan de las ensaladas como yo, aquí te dejo mis ensaladas favoritas. ¡Seguro que alguna te sorprende!
Ingredients
- 2 tomates
- 2 aguacates
- 1 queso mozzarella
- 1 bolsa rúcula
- 1 cda. vinagre de Módena
- 2 cdas. aceite de oliva virgen extra
- ½ cdita. sal
- 1 bolsa brotes verdes opcional
Instructions
- Si vas a utilizar las lechugas de brotes verdes, puedes ponerlas en el fondo de una ensaladera, creando una especie de cama para los demás ingredientes.
- En una tabla de cortar, corta los tomates en cuadrados, el queso mozzarella y los aguacates. Echa unas gotas de zumo de limón en los aguacates para que no se oxiden. Echa los ingredientes en la ensaladera.
- En un tarro de cristal puedes preparar un aliño con aceite de oliva, vinagre de Módena y un poco de sal. Las cantidades son orientativas. Si te gusta más o menos aceite o vinagre, aliña a tu gusto.