Si la repostería no te sale muy bien, asegúrate de no estar cometiendo ninguno de estos 10 errores frecuentes en la repostería sin gluten. Son errores muy comunes pero con soluciones muy sencillas. Todos hemos estado ahí y es que nadie nace sabiendo. Por eso y basado en mi propia experiencia y errores, puedo aconsejarte evitar estos 10 errores.
Y es que no es lo mismo la repostería tradicional, que la repostería sin gluten. Hay muchísimas harinas sin gluten (en esta guía te hablo de muchas de ellas) y no todas se comportan igual. Unas son más pesadas, otras aportan sabores diferentes o pueden cambiar la textura. Por eso, conocerlas, trabajar con ellas y aprender de los errores es fundamental.
Llevo más de 7 años haciendo bizcochos, magdalenas, galletas… y he hecho cosas riquísimas. Pero no todas han salido bien a la primera. Si puedo evitar que tú cometas alguno de mis mismos errores, estaré muy feliz de haber ayudado.
1. No pesar o medir los ingredientes.
La repostería tiene su ciencia; tiene que tener un equilibrio entre los ingredientes húmedos, secos, cantidad de huevos o de impulsor químico (o polvos de hornear). Por lo tanto, te recomiendo medir o pesar los ingredientes. El echar los ingredientes «a ojo» en repostería no sirve. Debemos respetar proporciones y el equilibrio entre líquidos y secos.
¿Cómo puedo pesar los ingredientes? Pues para pesarlos, necesitas una báscula. No tiene que ser nada cara, pero es preferible que pese cantidades pequeñas, desde 1 o 2 gramos.
Para medir los ingredientes de una receta necesitas un set de medidores. Los más comunes son las tazas, cucharas y cucharaditas de medida americana. Tampoco es nada caro y la verdad que son súper útiles.
Ahora bien, me adelanto a una pregunta muy frecuente: ¿cuántos gramos son una taza de harina? la equivalencia entre una taza y sus gramos depende del ingrediente. No todas las harinas ni almidones pesan lo mismo. Cuando hablamos de medidas, no todos los ingredientes tienen el mismo peso.
2. No entender las harinas y almidones sin gluten.
En este post detallado os hablo de muchísimas harinas y almidones sin gluten. Hay muchísimas harinas sin gluten (seguro que alguna que otra te sorprende) y se comportan de forma diferente. Unas absorben más líquido que otras, unas aportan más sabor, otras aportan más almidón y son más ligeras y otras aportan más humedad a la masa.
Lo importante es ir probando y conociendo las harinas. Yo llevo más de 7 años probando recetas sin gluten, poniendo las harinas a prueba; observando cómo se comportan. Y créeme cuando te digo que no tiene nada que ver una harina con otra y menos con el funcionamiento de los alimdones. Sino, podemos llevarnos un susto cuando intentamos sustituir en una receta una harina o almidón por otra.
Por intentar ponerte algún ejemplo: si la receta pide harina de arroz y usamos harina de arroz integral, nos va a quedar menos esponjoso. Si la harina pide maicena y usamos almidón de yuca, nos va a quedar una miga más húmeda y gomosa. Y así podría seguir. Debemos ir aprendiendo (prueba y error) cómo funcionan las diferentes harinas y almidones que existen sin gluten.
3. No tener los ingredientes a temperatura ambiente.
Para hacer repostería y siempre – a menos que la receta indique lo contrario – los ingredientes han de estar a temperatura ambiente. Puede parecer una tontería, ¿verdad? ¡Pero te prometo que no lo es! Unos 30 minutos antes, sacar la mantequilla y los huevos de la nevera. Si conservas alguna harina en la nevera o incluso en el congelador, lo mismo.
Sabiendo que es importante que los ingredientes estén templados, a temperatura ambiente, es fácil evitar este error frecuente en la repostería sin gluten, ¿verdad?
4. No usar moldes y utensilios de calidad.
No es lo mismo caro que de calidad (aunque es cierto que a veces lo barato es de mala calidad). Si queremos hacer unos donuts y el molde está arañado, la masa se pega y son imposibles de desmoldar, pues no quedarán bonitos, ¿verdad?
Si para hacer un bizcocho usamos un molde de silicona barato que no reparte bien el calor, es probable que se queme por unas partes y en otras parezca medio crudo.
¿Me entiendes verdad?
En mi tienda de Amazon te dejo una lista con mis moldes y gadgets de repostería favoritos por si te apetece echarles un vistazo.
5. ¿Te falta esponjosidad?
Si una receta ves que no ha crecido lo suficiente comparado con la foto original, puede ser por varios motivos.
1º Asegúrate que el impulsor químico (levadura Royal) o el bicarbonato está en buenas condiciones y no está caducado.
2º Bate enérgicamente lo huevos con azúcar hasta espumar y luego añade el aceite en un hilo. Esta técnica ayuda a meter mucho aire en las masas y a que queden bizcochos, magdalenas o muffins más aireados.
Después de cientos de bizcochos (quizás no debería presumir de esto porque la mayoría luego los he probado!) te puedo garantizar que un impulsor químico o el bicarbonato caducado nos ha pasado a todos!
6. No conocer tu horno.
Ay!!! Este punto es fundamental. Conocer tu horno, su funcionamiento y estar seguro de que realmente alcanza la temperatura interior que marca es importantísimo (para ello, te recomiendo un termómetro de horno, son baratos y funcionan de maravilla).
La mayoría de las recetas de repostería además requieren del precalentamiento del horno antes de introducir la masa al mismo. Asegúrate de respetar esos tiempos y de que el horno haya tenido tiempo de alcanzar la temperatura deseada antes de iniciar el horneado.
*Al mudarme a Berlín, el piso es de alquiler y el horno es, digamos, básico. Acostumbrada a un buen horno, me ha costado adaptarme al nuevo. Tarda mucho en precalentar así que comprarme el termómetro de horno ha sido fundamental. Ahora sé – después de tirar varios bizcochos y panes – que tarda bastante en llegar a una temperatura de 180º para poder hornear repostería.
7. Abrir la puerta del horno.
Otro de los 10 errores frecuentes de la repostería sin gluten es abrir la puerta del horno… para ver qué se cuece ahí dentro.
Si es posible, no abras la puerta del horno durante el horneado. Si ves que se está quemando o hay algo mal, lo ideal es no abrir hasta que no haya pasado al menos la mitad del tiempo de horneado. ¡Abrir antes de este tiempo la puerta del horno puede hacer que el bizcocho o magdalenas se hundan en el¡ centro!
8. No usar mejorantes: goma xantana o goma guar.
Para unos resultados excelentes en repostería sin gluten yo siempre recomiendo usar un sustituto del gluten como es la goma xantana. Si no sabes lo que es, aquí he escrito largo y tendido sobre qué es y para qué sirva la goma xantana.
Ahora bien, no es 100% imprescindible. Si elegimos bien las harinas y almidones, podemos evitar usarla y que no se desmiguen demasiado las masas. En cualquier caso, no afecta al sabor sino solamente a la textura.
Cuando empecé a hacer repostería sin gluten SIEMPRE usaba goma xantana, ahora según las recetas y sabiendo qué resultados puedo obtener, lo puedo obviar bastante a menudo. Como sé que a algunas personas no les sienta bien o simplemente lo quieren evitar, he creado un libro con 18 recetas de repostería fáciles sin gluten. No llevan goma xantana y la lista de ingredientes es sencilla. Te cuento un poco más en el último punto.
e-book Repostería fácil sin gluten
Tus recetas de repostería sin gluten de referencia: ¡fáciles, deliciosas, súper esponjosas y que siempre son un exitazo!
9. Necesitas más líquidos.
Las harinas sin gluten absorben más líquidos que la harina de trigo. Por eso, cuando adaptas una receta con gluten quizás notes que se queda un poco seca. Prueba a ajustar un poco alguno de los líquidos o a usar recetas con frutas y verduras que ayudan a mantener las migas hidratadas.
Otro truco es usar azúcar morena ya que es más húmeda que el azúcar blanco.
10. Consejos final: empezar por recetas fáciles y probadas.
Una buena receta de base es fundamental. Por eso, cualquiera de las 18 recetas que forman parte de mi último libro Repostería FÁCIL sin gluten, son un acierto. Una buena selección de harinas y almidones para hacer bizcochos, magdalenas, galletas, cheesecake de una calidad increíble. Texturas súper esponjosas y sabores increíbles con ingredientes fáciles de encontrar.
En este libro vas a encontrar 18 recetas espectaculares, que son:
- galletas de trigo sarraceno
- bizcocho de yogur
- tarta de queso (new york cheesecake)
- merenguitos
- muffins de zanahoria
- cookies tipo levain
- bizcocho de chocolate
- magdalenas
- tarta de nata y fruta
- bizcocho genovés
- brownie sin harina
- tiramisú
- tarta de queso y mango (sin horno)
- vasitos de aprovechamiento
- gofres
- tortitas (sin azúcar, endulzadas con plátano)
- scones de frambuesa
- donuts de limón
Puedes conseguir el tuyo aquí: