Cómo me gustan las alcachofas… pero no sabía cocinarlas. Lo intenté una vez y fue un fracaso absoluto. Estaban durísimas, aunque la verdad es que tenían buena pinta. Había visto una foto en Instagram y explicaban muy brevemente cómo se preparaban. Seguí sus indicaciones pero no había forma de comerse esas alcachofas al horno que tan buena pinta tenían.
Así que recurrí a la sabiduría de mi madre y le pregunté cómo se preparar y cocinan las alcachofas. Me explicó que hay que pelarlas muy bien (hay que quitar bastantes capas), rebajar la parte que queda cerca del tallo con la ayuda del pelapatatas y cortar las hojas de arriba. Además, yo las había comprado pequeñas y las metí al horno tras hacerles una mini limpieza de hojas exteriores. Y resulta que primero hay que hervirlas. Gran error de novata.
Así que me he puesto manos a la obra, siguiendo al pie de la letra todos los consejos de mi madre y creo que el resultado es evidente. En casa las hemos tomado como aperitivo según han salido del horno (¡previa espera para hacer las fotos!) pero se pueden tomar como acompañamiento de una carne o pescado. También se pueden acompañar de una ligera vinagreta de aceite de oliva virgen extra y limón si te gusta.
También he aprovechado los restos que me quedaron para un mediodía: simplemente calentando en las láminas de alcachofas en una sartén con un poquito de AOVE, unas gulas y unos ñoquis rellenos de pesto sin gluten y me quedó un plato combinado riquísimo.
Ingredientes
- 8 alcachofas grandes
- 2 cdas. aceite de oliva virgen extra
- 1 zumo de limón
- 1 cdita. sal y pimienta
Elaboración paso a paso
- Pelar bien las alcachofas, cortar el exceso del tallo y rebajar las hojas de arriba. Queremos quedarnos con el corazón de la alcachofa para que quede bien tierna.
- Hervir en agua con un poco de limón y sal. Enseguida se oxidan pero como van al horno después, no te preocupes.
- Paso importante: escurrir muy bien el agua de las alcachofas. Yo las he dejado en el colador mientras se enfriaban y luego las he escurrido con la mano. Con un cuchillo bien afilado, laminamos cada alcachofa en tres o cuatro láminas, según lo gorditas que sean.
- HORNO: Coloca las alcachofas en la bandeja del horno (con un papel de hornear) y salpimienta, echa un poco de aceite, zumo de limón y si quieres echar alguna hierba aromática, es el momento. 180º durante 15 min. AIR FRYER: Coloca las alcachofas en la cesta de la Air Fryer (seguramente necesites dos o tres tandas). Salpimienta, aceite, limón y si opcionalmente, añade hierbas o especias al gusto. 180º 6-7 min.